Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Conociendo al rival: Kashiwa Reysol

La Suruga Bank se inició en el 2008 con el fin de enfrentar al campeón de la Copa Sudamericana y al ganador de la Copa J. League de Japón (conocida también como Nabisco, quien es el patrocinador de la misma desde 1992).

La primera edición de esta final, que se disputa en un único partido en tierras niponas, se jugó entre Arsenal de Sarandí y Gamba Osaka con victoria del conjunto argentino. En ese año la idea principal era que la Suruga Bank permaneciera por cuatro años a modo de prueba, pero se definió realizarla al menos hasta el 2015 por la gran aceptación del público.

Esta será la séptima edición que enfrentará al Kashiwa Reysol y al Club Atlético Lanús. Según el reglamento que estipula la Copa, los partidos deben jugarse en la cancha del campeón japonés por lo que en esta oportunidad se dará en el estadio Hitachi Kashiwa que presenta una capacidad para 15.900 personas y se encuentra a 50 kilómetros de la ciudad de Tokio. 

Kashiwa Reysol llegó a esta final tras vencer 1 a 0 a Urawa Reds en la última fase de la Copa J. League. Este partido se disputó en el Estadio Nacional de Tokio en noviembre del 2013; siendo la primera vez que este equipo participa de este torneo. Logró llegar hasta esta instancia bajo la conducción del entrenador brasileño Nelsinho Baptista quien se encuentra al mando del conjunto desde el 2009.

El Kashiwa tuvo su época dorada en 1970, ya que en 1972 se consagró campeón de la liga y de la Copa del Emperador, trofeo que repitió tres años más tarde. En 1999 logró el título de la Copa J. League y llegó al nuevo milenio siendo el mejor posicionado en la clasificación general tras haber finalizado en la tercera posición en dos oportunidades consecutivas luego de la Copa obtenida.

En el 2002 el Kashiwa comenzó a ver su época más oscura. Siendo uno de los últimos en la tabla, tropezó con un descenso a la J. League Division en el 2005. Logró ascender una temporada más tarde, sin embargo su estadía en la máxima categoría japonesa no fue fructífera ya que en el 2009 cayó nuevamente en el descenso. De la mano del entrenador brasileño, retomó su lugar en la primera división y mantiene su racha hasta el 2011 donde consigue el título de la J. League Division 1, siendo el primer equipo de la historia de su país, que se consagra campeón proveniente del ascenso. Gracias a este trofeo participaron de la Copa Mundial del Clubes ese mismo año, finalizando cuartos en el podio.

 

 

 

 

OTRAS NOTICIAS