Inició la cuenta regresiva para ese evento distintivo, que mueve las agujas de la emoción y pasión. Con el Clásico del Sur en el horizonte inmediato, el plantel de Ezequiel Carboni se reencontró con el trabajo el lunes, tras el empate con Temperley, e inició la preparación del duelo con el Taladro.
La jornada arrancó en los campos cuatro y cinco del polideportivo, donde el cuerpo técnico junto a la plantilla para llevar a cabo una charla.
Luego el preparador físico Héctor Cóceres tomó la posta para diagramar una entrada en calor con movilidad y loco, que se extendió durante diez minutos.
En la continuidad de la práctica, el entrenador generó un ejercicio de posesión de balón aeróbico y con consignas lúdicas, en el que participaron todos los players y que tuvo seis arcos de diminutas dimensiones. Esta tarea duró veinte minutos.
Aquellos que actuaron como titulares ante el Gasolero finalizaron la faena y se dedicaron a la flexibilidad, elongación y baños de contrastes para completar la recuperación pos competencia.
Por otra parte, el resto del plantel prosiguió con un ejercicio completo táctico, que tuvo como inicio una posesión de pelota en un cuadrado delimitado y luego se abría a una salida rápida para centrar y definir sin oposición. Para este set se desarrollaron tres bloques de ocho minutos de mucha intensidad.
Leonel Di Plácido se movió de manera diferenciada con su plan de rehabilitación y fortalecimiento de la zona por la lumbalgia, así como lo acompañó Lucas Vera, quien ya se recuperó de la fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo pero se lo preservó para evitar un choque en los trabajos de espacios reducidos.
La jornada arrancó en los campos cuatro y cinco del polideportivo, donde el cuerpo técnico junto a la plantilla para llevar a cabo una charla.
Luego el preparador físico Héctor Cóceres tomó la posta para diagramar una entrada en calor con movilidad y loco, que se extendió durante diez minutos.
En la continuidad de la práctica, el entrenador generó un ejercicio de posesión de balón aeróbico y con consignas lúdicas, en el que participaron todos los players y que tuvo seis arcos de diminutas dimensiones. Esta tarea duró veinte minutos.
Aquellos que actuaron como titulares ante el Gasolero finalizaron la faena y se dedicaron a la flexibilidad, elongación y baños de contrastes para completar la recuperación pos competencia.
Por otra parte, el resto del plantel prosiguió con un ejercicio completo táctico, que tuvo como inicio una posesión de pelota en un cuadrado delimitado y luego se abría a una salida rápida para centrar y definir sin oposición. Para este set se desarrollaron tres bloques de ocho minutos de mucha intensidad.
Leonel Di Plácido se movió de manera diferenciada con su plan de rehabilitación y fortalecimiento de la zona por la lumbalgia, así como lo acompañó Lucas Vera, quien ya se recuperó de la fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo pero se lo preservó para evitar un choque en los trabajos de espacios reducidos.
