La expulsión de Iván Marcone y la acumulación de cinco amarillas de Román Martínez obligan al técnico pensar en sus reemplazantes. Por eso, en el ensayo matutino probó algunas variantes sobre todo al tratarse de una zona medular de la estructura como el mediocampo.
El plantel redondeó 40 minutos de fútbol en el césped de la Fortaleza y se estima que las mayores chances en Ayala y Castellani. Asimismo, el otro foco de atención de la jornada pasó por el estado de Pablo Mouche, quien finalmente realizó la primera parte de activación física con sus compañeros, mientras que después se prestó a diferentes ejercicios para la rehabilitación de su esguince. El delantero trabajará el viernes con el grupo para dilucidar su evolución y en caso de una respuesta exitosa estará a disposición para visitar Victoria.
El ex Boca dialogó con la prensa tras el entrenamiento y se refirió a su dolencia. “Mejoré muchísimo en estos días, me siento bien y lo seguiremos manejando con el cuerpo técnico y los médicos. La lesión evoluciona muy bien, mejor de lo esperado”, sostuvo el atacante. Asimismo, descartó la posibilidad de infiltrar la zona: “No pasa por mi cabeza infiltrarme, tengo 28 años y acumulé una experiencia suficiente que me hace pensar las cosas antes de hacerlas”.
En relación con los cambios obligados que presentará el Granate, Mouche opinó: “Mis compañeros están preparados, siempre que les tocó jugar rindieron y son consientes que tienen que ayudar al equipo”.
Por último, el punta analizó la recta final que se avecina en el torneo. “Viene lo más lindo, el trayecto decisivo que nos encontramos punteros y debemos defender eso. No nos podemos relajar, porque el recorrido es difícil, hay que estar preparados”, concluyó.
