Se extiende el lazo, esa relación fructífera que evidenció una evolución en el camino. El Club Lanús confirmó la continuidad de Sebastián Saborido para comandar al plantel que competirá en la edición 2024/25 de la Liga Argentina. El entrenador activará su tercera temporada consecutiva y así se fortalecerá el proyecto consensuado.
El Granate vivenció una exitosa performance en la reciente 2023/24, a raíz de liderar la Conferencia Sur con un registro impresionante de 25 victorias y solo 7 derrotas a lo largo de la Fase Regular, lo que se tradujo en una productividad del 78.1%, lo que lo erigió en la tercera mejor marca de toda la competencia, entre los 33 participantes. El sendero en los playoffs se configuró con la caída en semifinales, en la serie ante Villa Mitre. Empero, Lanús disfrutó de un equipo con una identidad clara, un estilo que se moldeó con el transcurso del torneo y que estimuló el acompañamiento de la afición.
A la hora de analizar las sensaciones de prolongar su estadía en el Grana, Saborido ponderó la apuesta de la institución y sostuvo: “El hecho de poder continuar con una idea, con un proyecto de trabajo es fundamental para un desarrollo coherente, que es lo que Lanús intenta desde hace un tiempo”. Y agregó las virtudes de esta sostenibilidad: “Está demostrado y comprobado que aquellos proyectos que han mantenido unas ideas y coherencia de trabajo dentro de la Liga Argentina han sido competitivos y han tenido éxito a través de lo que ha pasado en las últimas temporadas”.
Desde aquel desembarco en el Granate, para la edición 2022/23, el coach ha aportado para transitar por una línea ascendente en resultados y rendimiento. En relación con esa circunstancia y lo que se presume para el futuro inmediato, Sebastián opinó: “Hemos hecho una escalada desde que comenzó al proceso hasta ahora que nos ponen la vara alta y nos obligan a ser responsables a la hora de encarar una nueva temporada”.
Los engranajes se aceitaron y se creó una armonía en el modelo de Lanús en la pasada temporada, con picos brillosos de nivel. Las ilusiones crecieron en torno a ese equipo, avalado por el rendimiento en el parquet. Respecto a su análisis de la campaña, Saborido exteriorizó: “Está claro que fue altamente positiva, inclusive superando algunos de los objetivos que nos habíamos propuesto al principio. Se terminó con un sprint final de Fase Regular muy bueno que nos permitió por ahí incluso ilusionarnos a todos, pero creo que no hay nada que reprocharle porque estuvimos dentro de los objetivos que podíamos cumplir”.
La configuración de la plantilla se erige en un desafío, con la búsqueda de la manutención de varios elementos y la necesidad de incorporar nuevos pasajeros. Sobre esta articulación, el entrenador razonó: “Tuvimos casi que empezar de nuevo la última temporada y ahora cómo se han valorizado los jugadores luego de terminada esta temporada, por ahí cuesta y siempre es importante mantener una base. Creo que dentro de las posibilidades, el roster para la próxima temporada es correcto. Vamos a intentar que podamos mantener una línea de juego”.
Atento a la magnitud de la institución, su historia, el paso evolutivo ejecutado recientemente y otras variables como el mercado, el coach iluminó el objetivo trazado, a priori, para la 2024/25 de la Liga Argentina. “Siempre de base o de piso es la responsabilidad de ser competitivos, de dar pequeños pasos para ir construyendo una estructura que permita en algún momento a Lanús estar preparado para para dar un paso”, manifestó y añadió otros factores importantes: “Sobre todo ser equilibrados, ser competitivos y mantener una idea”.