El Granate se reincorporó a las prácticas el lunes a la mañana, luego del interrumpido cotejo frente a Tigre y ya focalizó su norte en el compromiso contra Arsenal, que se disputará el viernes a las 20.30.
La tripulación de Guillermo entrenó en el Polideportivo en dos grupos divididos, con los titulares en Victoria en el gimnasio para llevar a cabo tareas regenerativas. Por su parte, los que ocuparon un lugar en el banco de suplentes y el resto del plantel trabajaron en la cancha número siete de césped sintético. En el campo se realizaron tareas con pelota, siendo la principal propuesta un enfrentamiento de dos equipos de diez futbolistas.
El desnaturalizado desarrollo del primer tiempo en Tigre no trajo complicaciones en el plano físico, por lo cual todos los jugadores se encuentran a disposición del Mellizo.
Una vez finalizada la jornada, Latuaro Acosta dialogó con la prensa y compartió sus concepciones del partido suspendido y el compromiso que se le avecina a Lanús. En relación con la decisión de interrumpir el encuentro en Victoria, el Laucha opinó: Al empezar parecía que la pelota rodaba, pero a medida que pasaron los minutos no se podía jugar. Para mi estuvo bien suspendido porque no daba para más.
Ante la consulta sobre si el Granate resultó damnificado al disputar la primera etapa con el Matador, el delantero soltó: Creo que salimos perjudicados porque ahora tenemos que tratar de llevarnos los tres puntos en 45 minutos, no queda otra para seguir peleando.
Las inclemencias climáticas acarrearon la peligrosidad en el plano físico. La cancha estaba peligrosa para todos, en cualquier barrida o cruce se iba la pierna por las condiciones del campo por suerte no surgió ninguna lesión, expresó el nacido en Glew.