En su plan de sábado a la noche salió de expedición a Florencio Varela y logró su cometido, aquella meta de extender su racha positiva para mantenerse prendido en la cima. De la mano de los canteranos, Lanús conquistó una vital victoria 2-1 frente a Defensa y Justicia, en el marco de la 12° fecha del Torneo de Transición 2014.
El conjunto de Guillermo Barros Schelotto contó con los goles de Nicolás Pasquini y Jorge Valdez Chamorro para sumar su octavo encuentro sin derrotas y su cuarto triunfo consecutivo como visitante. De esta manera, el Granate alcanzó los 24 puntos y no le pierde pisada al líder River Plate, que ostenta 25 unidades y recibe a Belgrano el domingo.
El elenco del Mellizo afrontó este compromiso con una rotación de elementos, para dosificar energías ante la doble competencia y con los regresos de los seleccionados. Las variantes de engranajes no modificaron la filosofía y postura habitual de Lanús, que demoró algunos minutos para acomodarse en el terreno, ya que Defensa comenzó mejor presionando y controlando el balón con su circuito de juego.
En una de las típicas transiciones defensa-ataque, Acosta encaró por la calle central del campo y tras eludir varias piernas fue derribado en el borde del área. Pasquini se encargó de ese peligroso tiro libre y con una ejecución precisa superó la barrera, con su zurda, para que la pelota se hunda en la red, ante la atónita mirada del arquero, a los 15 minutos. El Grana consiguió abrir el marcador en una de sus primeros avances claros.
Apenas tres minutos después del golazo del lateral izquierdo, Gómez soltó un envío largo a las espaldas de la defensa rival, que Benítez capturó y desniveló por derecha para entregar un pase a la medialuna para la llegada sin marca de Valdez Chamorro, quien controló el esférico y remató con justeza al rincón izquierdo de Pellegrino para convertir el 2-0.
Lanús golpeó con total contundencia, como un boxeador agazapado que noquea al rival en escasos movimientos.
Los de Barros Schelotto exhibieron una notable capacidad para lastimar con las progresiones directas y veloces, sobre todo con un Benítez punzante. Justamente el delantero elaboró una maniobra impresionante a los 42, cuando pasó de campo propio hasta el área adversaria a pura gambeta, pero su definición sutil se chocó con la atajada de Pellegrino.
En el cierre de la primera etapa, Defensa se encontró con un penal polémico, ya que en un centro sin peligro de derecha Monteseirín frenó la pelota con la cadera, pero Diego Abal consideró equivocadamente que la tocó con la mano. Camacho le pegó al medio del arco y convirtió el descuento para el local.
Tras las charlas en vestuarios, el Halcón salió decidido a buscar el empate con el adelantamiento de sus líneas y generó un ataque en bloque con muchos elementos en campo contrario. Los de Darío Franco dominaron la posesión y el ritmo de juego. Mientras que Lanús esperó en su terreno para hallar contraataques, por eso Guillermo decidió el ingreso de Somoza, a los 10, para rearmar la recuperación en el mediocampo.
En esa mejor prestación, Defensa dispuso de una oportunidad muy nítida, cuando González reventó el travesaño, a los 25. El Granate se dedicó a sostener la ventaja, con intensidad y compromiso colectivo. En esa tesitura, la entrada de Bella modificó el dibujo táctico hacia un 4-4-2, para achicar los espacios del oponente.
A pesar de sufrir los embates del Halcón, Lanús logró sobrepasar los momentos de zozobra y terminó festejando en la noche de Florencio Varela.