Ya activó la maquinaria para afinar los engranajes y moldear la fisionomía para afrontar un nueva aventura. Lanús comenzó la pretemporada para el Torneo Federal y el viernes cerró su primera semana completa de actividad.
El Granate activó su puesta a punto para la segunda intervención consecutiva en el certamen. La tripulación de Ezequiel Vallet atraviesa esta ardua etapa, cuya primera meta se halla en el conocimiento de los nuevos integrantes del plantel.
Lanús comenzó a trabajar el pasado jueves con las mediciones antropométricas, evaluaciones físicas y quinésicas. El lunes llegó el turno de arrancar con las jornadas en el campo, que se caracterizan por un solo bloque extenso de entrenamiento, que suele incluir tres horas, mayormente por la mañana.
El coach describió las particularidades de este periodo: “Tenemos buenas sensaciones, se avizora un buen grupo humano con muchas ganas de trabajar y con ambición. En estos días se basa en lo físico y acondicionamiento para emparejar las cargas y contar con todos al mismo nivel para después construir en el juego”.
Respecto a la metodología de entrenamiento, el entrenador exteriorizó: “Creemos que al jugador lo prepara mejor, así como los doble turno tienden a desaparecer en el alto rendimiento. De esta manera podemos trabajar un bloque técnico, uno físico y uno de campo”.
A la hora de compartir la experiencia de la institución con la pasada temporada y la mirada para la venidera, Vallet contó: “La idea fue conocer el torneo porque el club venía de la Liga Nacional, lo que nos llevó a conocer otro formato de torneo y otra dinámica. Ahora nos ponemos el objetivo del día a día, es un torneo de resistencia y determinar metas a largo plazo no me parece acertado”.
El Granate activó su puesta a punto para la segunda intervención consecutiva en el certamen. La tripulación de Ezequiel Vallet atraviesa esta ardua etapa, cuya primera meta se halla en el conocimiento de los nuevos integrantes del plantel.
Lanús comenzó a trabajar el pasado jueves con las mediciones antropométricas, evaluaciones físicas y quinésicas. El lunes llegó el turno de arrancar con las jornadas en el campo, que se caracterizan por un solo bloque extenso de entrenamiento, que suele incluir tres horas, mayormente por la mañana.
El coach describió las particularidades de este periodo: “Tenemos buenas sensaciones, se avizora un buen grupo humano con muchas ganas de trabajar y con ambición. En estos días se basa en lo físico y acondicionamiento para emparejar las cargas y contar con todos al mismo nivel para después construir en el juego”.
Respecto a la metodología de entrenamiento, el entrenador exteriorizó: “Creemos que al jugador lo prepara mejor, así como los doble turno tienden a desaparecer en el alto rendimiento. De esta manera podemos trabajar un bloque técnico, uno físico y uno de campo”.
A la hora de compartir la experiencia de la institución con la pasada temporada y la mirada para la venidera, Vallet contó: “La idea fue conocer el torneo porque el club venía de la Liga Nacional, lo que nos llevó a conocer otro formato de torneo y otra dinámica. Ahora nos ponemos el objetivo del día a día, es un torneo de resistencia y determinar metas a largo plazo no me parece acertado”.