Alistó todo para embarcarse en un viaje cargado de significancia, dado que se trata de una aventura compleja, que en caso de resolución positiva implicará una nueva gesta. Lanús finalizó su preparación en tierras argentinas para el trascendental partido de vuelta de la Recopa Sudamericana, dado que llevó a cabo un entrenamiento el lunes a la tarde en el estadio y luego se guardó en el hotel a la espera del traslado a Belo Horizonte, que se producirá el martes a la mañana.
La tripulación de Guillermo trabajó en el estadio principal, donde desarrolló un ejercicio táctico de once contra once, que contó con las constantes indicaciones del entrenador. En esta propuesta el técnico volvió a probar variantes en la formación. No obstante, Barros Schelotto no confirmó la alineación titular, aunque reconoció, en rueda de prensa, que maneja entre sus opciones la modificación del dibujo hacia un 4-4-2.
Teniendo en cuenta esta probable disposición, Lanús saldría al césped con: Marchesín; Araujo, Gómez, Braghieri, Velázquez; González, Somoza, Ortiz, Ayala; Acosta y Silva S. De esta manera, el equipo presentaría dos cambios en relación con la caída 1-0 del pasado miércoles, con los ingresos del Marciano y el Laucha, quienes reemplazarían a Benítez y Melano.
Una vez culminada la faena, el plantel se subió al micro que esperaba en el playón y se dirigió al hotel 725 Continental, donde se concentró para emprender el vuelo charter a Belo Horizonte, el martes a las 10, en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.
Ya en tierras brasileñas, la delegación granate se hospedará en el Ouro Minas, mientras que el martes a las 19 realizará el reconocimiento de campo del estadio Mineirao. Asimismo, el jueves a la mañana entrenará en el predio de Cruzeiro y a las 16 regresará a nuestro país.
