Una buena concurrencia de espectadores presenció la disertación referida al rol social que conllevan las asociaciones civiles sin fines de lucro. Estas entidades sufren constantemente diversos inconvenientes debido a las políticas de ajuste y tarifazo impulsadas desde el gobierno nacional, y provocan que algunos clubes de barrio deban cerrar y por lo tanto dejar de brindar los servicios a la comunidad.
Luis María Chebel, vicepresidente primero del Club Atlético Lanús, tomó la palabra junto a Gustavo Veiga, periodista de Página 12; y Rubén González Marengo, presidente del Club Social y Deportivo Franja de Oro, de Pompeya. La conducción estuvo comandada por Jorge Bragulat, director del Centro de Estudios de la Economía Social de la Universidad Nacional de Tres de Febrero.
El directivo del Granate realizó un recorrido didáctico y cronológico de la historia y el presente del club. Afirmó que la unidad política fue un factor determinante para lograr el resurgimiento y vivir una actualidad plagada de grandes logros.
Posteriormente, los disertantes se opusieron fervientemente al proyecto de sociedades anónimas deportivas, metodología que el actual presidente de la nación buscó hace 20 años y ahora pretende reflotar.
Una de las banderas más trascendentales que defendió desde el primer y último día la idea de los clubes en manos de sus socios es Emilio Chebel, ex presidente de la institución, padre de Luis, y a quien se le rindió un emotivo homenaje una vez finalizada la jornada. Su esposa y sus hijos subieron al escenario para recibir una más que merecida condecoración.
