En una noche adversa en cuanto al dominio del tablero, Lanús ejecutó una mejoría en el cierre del tercer segmento y comienzo del último, por eso a falta de 8:30 minutos perdían 58-54. No obstante, Racing apretó el acelerador, se subió al ritmo del comandante Alejo Barrales y estampó un sprint final de 21-7, con el que consolidó el triunfo.
La historia comenzó con un primer cuarto de altísimo nivel de Racing, que fluyó en el terreno para tomar una ganancia 23-14, ante un Lanús tozudo con los triples (1/7) y con deficiencias para el balance defensivo.
En el segundo segmento, el Granate optimizó con la rotación, metió un parcial 10-4 para achicar 29-24. Pero el visitante reaccionó y clausuró en ganancia 36-30 con un 53% en tiros de campo y una supremacía en los rebotes 21 contra 12.
En el tercer capítulo, Racing continuó con su dominio del trámite y se escapó 45-36, a los 4 minutos. En ese momento aciago, Lanús recuperó terreno con Chaine (9) y lo dio vuelta 53-51, acompañado por las bombas de Kelly (6), aunque Acuña encestó un doble para el cierre 53-53.
Con otro semblante, el Granate se distanció 58-54, con una tarea muy incisiva de Aaron Pablo (10 puntos en el cuarto). Aunque repitió errores en la toma de decisiones y no encontrarle solución al desequilibrio de Barrales, para que la chicharra sonara con la victoria de Racing.
El equipo de Chivilcoy quedó con un registro 8-3, muy cerca del líder Zárate (8-2). Por su parte, Lanús se alejó de la cima con su marca 6-5.