La tripulación de Jorge Almirón completó una nueva sesión de entrenamiento, la segunda de la semana, en la mañana del martes.
Lanús apunta su norte en el venidero compromiso del torneo local, en el que recibirá a Gimnasia y Esgrima La Plata el lunes, a las 21.15.
La acción de la jornada comenzó en el campo ocho del polideportivo, donde el preparador físico Diego Ossés inició con un rondo, de quince minutos, y un set de coordinaciones sin pelota, en el que los jugadores debieron sortear obstáculos para activar, que se extendió por diez minutos.
Una vez culminada esa fase, la plantilla se trasladó a las canchas cuatro y cinco para desarrollar un ejercicio de posesión del balón, en el que se enfrentaron dos combinados de doce jugadores, en un espacio de 50 por 45 metros y que se realizó durante doce minutos.
Luego se dividió al plantel en tres grupos, de ocho integrantes, que circularon en dos estaciones. Por un lado un fútbol reducido, en un terreno de 50 x 40 metros, que tenía la consigna de recuperación al jugador que perdía la pelota y en caso de no lograrlo debía cumplir una actividad física como penalización. En tanto que en otro sector se diseñó un set de definiciones, con diversas variantes.
La práctica no contó con la intervención de Nicolás Aguirre ni Rodrigo Erramuspe, el primero se realizaba un estudio por imágenes a la tarde, mientras que el segundo se movió de manera diferenciada por un cuadro gripal.
La lejanía del choque con el Lobo generó que el cuerpo técnico decidiera otorgarle una jornada libre para mañana, por lo cual el trabajo volverá el jueves.
Lanús apunta su norte en el venidero compromiso del torneo local, en el que recibirá a Gimnasia y Esgrima La Plata el lunes, a las 21.15.
La acción de la jornada comenzó en el campo ocho del polideportivo, donde el preparador físico Diego Ossés inició con un rondo, de quince minutos, y un set de coordinaciones sin pelota, en el que los jugadores debieron sortear obstáculos para activar, que se extendió por diez minutos.
Una vez culminada esa fase, la plantilla se trasladó a las canchas cuatro y cinco para desarrollar un ejercicio de posesión del balón, en el que se enfrentaron dos combinados de doce jugadores, en un espacio de 50 por 45 metros y que se realizó durante doce minutos.
Luego se dividió al plantel en tres grupos, de ocho integrantes, que circularon en dos estaciones. Por un lado un fútbol reducido, en un terreno de 50 x 40 metros, que tenía la consigna de recuperación al jugador que perdía la pelota y en caso de no lograrlo debía cumplir una actividad física como penalización. En tanto que en otro sector se diseñó un set de definiciones, con diversas variantes.
La práctica no contó con la intervención de Nicolás Aguirre ni Rodrigo Erramuspe, el primero se realizaba un estudio por imágenes a la tarde, mientras que el segundo se movió de manera diferenciada por un cuadro gripal.
La lejanía del choque con el Lobo generó que el cuerpo técnico decidiera otorgarle una jornada libre para mañana, por lo cual el trabajo volverá el jueves.
