Inmiscuido en el sendero de la puesta a punto, Lanús completó el turno matutino, el miércoles, de su tercer día de pretemporada. Tras el descanso reparador de la siesta, la tripulación de Jorge Almirón volverá a trabajar en el polideportivo.Con la calidez del sol como acompañante ideal, el plantel concretó una mañana intensa, que incluyó diversas propuestas en lo físico. En primera instancia, el cuerpo técnico dispuso de una activación inicial de fuerza general. Luego, los jugadores desarrollaron tests de resistencia en velocidad de mil metros.
En la continuidad de la carga, la plantilla realizó un volumen importante de potencia aeróbica con trabajos intercalados de 12 minutos. Al unísono, algunos grupos se prestaron a una actividad de estímulo con balón.
Una vez finalizada la faena, los futbolistas almorzaron en el comedor y se dirigieron a la pensión para conciliar el sueño. Tras la siesta, el conjunto de Almirón retornará al césped de las canchas cuatro y cinco para cumplimentar el segundo turno. En esa etapa adquirirá absoluto protagonismo el esférico, dado que se desarrollarán diversos sets de fútbol en espacio reducido con consignas.
